Tripowin Piccolo Review

Pequeño Pero Matón

 

Tripowin Piccolo English Review

 

Valoración

 

Construcción y Diseño
90
Ajuste/Ergonomía
88
Accesorios
55
Graves
92
Medios
75
Agudos
70
Separación
70
Escena
70
Calidad/Precio
90

 

Pros

 

  • Calidad de su zona baja.
  • Nivel explícito de detalles y matices.
  • Medios cercanos, voces masculinas bien resueltas.
  • Primeros agudos en primer plano.
  • Sonido lleno.
  • Nivel de construcción muy bueno.
  • Buena ergonomía.

 

Contras

 

  • Detalles, instrumentos y voces comparten el mismo plano, lo que da una sensación de sonido comprimido.
  • Los medios-altos y primeros agudos son cercanos y presentes, pueden resultar fatigosos.
  • El peso de las cápsulas puede lastrar su uso continuado.
  • No trae caja o bolsa de transporte. Accesorios mínimos.

 

Enlace de Compra

 

https://www.linsoul.com/products/tripowin-piccolo

 

Enlace a la Tienda

 

https://www.linsoul.com/

 

Introducción

 

Tripowin parece otra marca China relativamente reciente. Tienen Web propia, pero en ella no encuentro historia sobre la marca. Tienen varios modelos en su haber, empezando por el modelo TC-01, siguiendo por el HBB Mele (una colaboración con el omnipresente Hawaian Bad Boy), hasta llegar a los actuales HBB Olina SE (sí, de nuevo HBB). No se caracterizan por tener modelos muy caros y el de mayor precio es un modelo de auriculares abiertos con un valor inferior a los 200$. En esta ocasión, tengo entre mis manos el nuevo modelo Tripowin Piccolo, cuyo precio es de 35$. Se presenta en dos colores: Silver y Black. La versión Silver es brillante, pulida y plateada, como no. Mientras que la versión Black también es metálica, pero con un acabado mate y rugoso, casi áspero. Monta un driver dinámico con diafragma LCP de tercera generación, “sometido a un procesamiento intensivo de láminas de polímero para la cristalización y reticulación de los polímeros, utilizando un material similar al empleado en el Kevlar, lo que da como resultado una excelente capacidad de respuesta del diafragma, una menor distorsión armónica total y la eliminación de las asperezas en los agudos”. Usan un cable con hilos de cobre OCC de gran pureza, con conexión 2Pin 0.78mm. Veamos todo lo que pueden dar de sí estos IEMS del rango económico.

 

 

Especificaciones

 

  • Tipo de Drivers: Dinámico de 11mm de cavidad dual con diafragma LCP de tercera generación.
  • Sensibilidad: 110dB±3dB
  • Impedancia: 32Ω±10%
  • Conector Jack: SE 3.5mm
  • Tipo de Conexión de la Cápsula: 2Pin 0.78mm
  • Cable: Cable de hilos de cobre de alta pureza OCC.
  • Longitud del cable: 1.2±5%

 

 

Presentación y Contenido

 

Los Tripowin Piccolo vienen en una caja de tamaño pequeño-mediano, de color blanco. Sus dimensiones son 139x96x40mm. Está recubierta de celofán. En la cara principal hay una serie de círculos concéntricos cuyas líneas negras se van haciendo más gruesas a medida que se acercan al centro. Sobre ellas hay una foto real de ambas cápsulas, en el mismo color que está en el interior. Arriba está la marca, abajo a la izquierda el nombre del modelo y una pequeña descripción sobre él. Abajo, a la izquierda hay uno logo que indica “High Quality In-Ear Monitor”. En la cara trasera se repiten los círculos concéntricos, aunque, en esta ocasión, su centro está en la esquina superior izquierda. En la parte de abajo está el nombre del modelo, se indica que ha sido diseñado por Tripowin y fabricado en China. Casualmente, también vienen las señas de “Apex CE Specialists Limited”, situadas en Irlanda y Manchester. Esta empresa y estos datos son los mismos que aparecen en el modelo que analicé la semana pasada: Kiwi Ears Quartet.
Retirado el cartoncillo exterior, se muestra una caja negra con el dibujo de los círculos concéntricos grises en la parte superior y el nombre del modelo en la parte inferior, en blanco. Debajo hay una tarjeta de garantía y otra certificando que ha pasado el control de calidad. Los IEMS están encajados en un molde oscuro, a medida. Arriba están las cápsulas, abajo el cable con las tips de silicona. En resumen, todo lo que traen es lo siguiente:

 

  • Las dos cápsulas.
  • Un cable de hilos de cobre de alta pureza OCC.
  • Tarjeta de garantía.
  • Tarjeta de control de calidad.
  • 3 pares de tips de silicona negra, tamaños SxMsL.

 

No hay ni bolsa de tela, ni estuche con cremallera, nada más que lo comentado. Lo mínimo imprescindible.

 

 

Construcción y Diseño

 

Los Tripowin Piccolo vienen en dos colores, Silver y Black. El modelo a analizar es el Black. Este modelo posee un recubrimiento mate oscuro bastante rugoso, con un acabado arenoso, bastante particular y visible. El tamaño de las cápsulas es pequeño tirando a mediano, aunque ligeramente gruesos. Su forma es de triángulo muy redondeado. La cara externa tiene surcos ondulados, mientras que en el centro hay tres huecos ovalados más grandes. La conexión de 2Pin 0.78mm está montada sobre una pieza ovalada que sobresale de la superficie. Junto a ella se puede leer el nombre de la marca en letras mayúsculas y blancas. En el lateral pequeño hay una pieza metálica dorada circular, con un agujero en el centro. En la cara interna, cerca de dicha pieza, están las letras que indican el canal, dentro de un círculo y en color blanco. Dicha cara interna posee una forma creciente hacia las boquillas y no hay ninguna protuberancia en ella. Existe un pequeño orificio en la base interna de las boquillas. Finalmente, dichas boquillas son de otro material, igual que la pieza dorada. Tienen 3 niveles de diámetro, la base de 6.5mm, el interior de 5.45mm y el borde de 6.1mm. Su longitud es de 4.5mm y su interior está protegido por una rejilla plateada metálica.
El conjunto es pesado y llama la atención por su acabado rugoso y mate. No se indica de qué material ha sido construido, pero por el peso es metálico.
El cable tiene una calidad ligeramente superior a los más básicos. Se trata de cuatro hebras enrolladas recubiertas de PVC negro. La funda del conector es un cilindro pequeño negro, con el nombre de la marca en letras blancas. El conector está chapado en oro y es de 3.5mm SE. La pieza divisora es otro cilindro negro metálico, más pequeño. El pasador es un anillo de plástico con dos agujeros en su interior por el que se deslizan el cable. Los cables tienen guías sobre oreja realizadas en plástico transparente semirígido. Las fundas de los conectores de 2Pin 0.78mm están en ángulo de 90º. Los pines están en el interior de una funda ovalada de plástico negro, apenas sobresalen. Como digo, la calidad del cable no es mala, no es rígido y no se enrolla. Aunque, en general, tiene el aspecto de modelo sencillo.
En general, el diseño de las cápsulas no es malo. Me gusta el acabado rugoso, mientras que la cara exterior posee un diseño algo minimalista, por no decir pueril. También me gusta la forma, que no es muy grande. Pero el peso lo encuentro algo descontrolado. El cable, simple y eficaz, sin más. Pese a que posee una conexión de 2Pin 0.78mm, el tipo de conexión cubierta no es la que pueda preferir, porque limita la universalidad de esta conexión y deben comprarse un conector adecuado.

 

 

Ajuste y Ergonomía

 

La forma de triángulo muy redondeado, de tamaño pequeño-mediano, encaja muy bien. El interior es limpio, no posee partes que rocen con el oído. Las boquillas tienen una buena inclinación y un tamaño que podría prometer una inserción media. La forma de las cápsulas se ajusta de manera adecuada, firme al pabellón y no permite rotación. Pese al grosor de las mismas, no sobresalen mucho de los oídos y con el cable quedan bastante bien integrados en la anatomía. El problema es el peso, aunque no es algo que moleste si se consigue un buen ajuste con unas tips que consigan un buen sellado oclusivo y persistente. Si se llega a conseguir, serían adecuados para uso diario, usar en transporte público, incluso andar. Con algo más de movimiento, el peso podría jugar alguna mala pasada.
Si se consigue un sellado oclusivo, el aislamiento llega a ser notable.

 

 

Sonido

 

Perfil

 

De nuevo, los Tripowin Piccolo poseen un perfil que ya es conocido para mí. No dudo que me guste y así lo he demostrado con las reseñas de los TKZK Ouranos (a los que se parecen mucho) y los TinHiFi T2 DLC 2022. Vuelvo a repetir que no se trata de un perfil neutro, pero sí equilibrado y homogéneo. En esta ocasión, el extremo subgrave es más suave y los graves se centran en su zona media. Los agudos también son ligeros y se nota una caída relativamente pronunciada en su primera parte. Podría repetir que se trata de un perfil en w minúscula, con unos graves redondos, medios-altos ligeramente excitados y agudos más controlados. El énfasis en la parte final de los medios le aporta claridad, chispa y vivacidad, que queda contrarrestada por el roll-off de los primeros agudos.

 

 

Graves

 

De alguna forma, no siento oscuridad en los Tripowin Piccolo. El rango inferior tampoco es apagado y aunque no llegue con un gran poder a las LFO, se defiende con buena linealidad hasta los 100Hz. Es cierto que los graves se excitan en su zona media y que la potencia no es muy alta (no son Bass-Heads), pero sí son capaces de ganar enteros según las tips usadas, así como el nivel oclusivo alcanzado. De esta forma, los graves se convierten en más sensoriales con un buen sellado.
El comportamiento es sorprendente en la prueba de tonos puros. Llega muy abajo con una mezcla de reproducción sensitiva, poco audible, siendo una respuesta bastante acertada para los 20Hz. Mejora mientras suben las frecuencias, sonando natural y muy poco coloreado. Debo reconocer que el comportamiento de los tonos puros de baja frecuencia es superior al de modelos más caros. Excelente.
Como resultado, la reproducción de los graves goza de realismo y naturalidad. También es técnicamente competente, demostrando una velocidad muy buena para su rango de precios. Podría decir que la capacidad técnica de los graves, en relación a su precio y rivales que he probado, supera el notable. Me resulta odioso tener que recurrir a argucias de revisor desganado, pero los graves de los Piccolo son claramente superiores, cualitativamente hablando, a su rango de precios. Han sido afinados para tener un buen nivel de potencia todoterreno, sin perder precisión, un golpeo conciso o velocidad. Se defienden bastante bien a la hora de seguir líneas de graves complejas o saturadas, siendo capaces de estratificar con relativa solvencia, aunque, siempre desde un punto de vista resolutivo básico o simplista. Tampoco se puede esperar una capacidad resolutiva superior en estos pasajes críticos, pero se defienden con gusto, profundidad, incluso naturalidad, sin caer en una vulgaridad representativa y mal generada. Al contrario, los Tripowin Piccolo llegan a sorprender en situaciones adversas. Y es algo que no es nada fácil, allí donde IEMS más caros lo pasan muy mal.

 

 

Medios

 

Queda claro que mis oídos se enfocan hacia las voces femeninas cuando escucho los Piccolo. También hay una chispa vívida fruto del énfasis en los medios-altos. Existe una mezcla de protagonismos entre el flash de los platillos y las voces femeninas. Es algo que puede llegar a fatigar en algunos puntos, ese nivel de dualidad interpretativo. Esta franja se siente cercana, en primer plano, pero también algo forzada, perdiendo naturalidad al dar más importancia a los detalles que a la base. Es cierto que los matices cobran vida, pero suenan con un timbre más irreal, comprimido en esta cercanía. Esos detalles tienden a estar enfocados, aun sin la completa anchura para exponerlos todos, suenan cercanos y se pueden tocar, aunque su reproducción no sea la más original o fiel. Las voces femeninas pueden sentirse algo afiladas, bruscas, incluso intimidantes, debido a su proximidad y tendencia más aguda. Echo de menos algo más de delicadeza y suavidad de su reproducción, así como algo más de control en su recreación.
Las voces masculinas también tienen presencia, pero son algo más relajadas. Un ligero toque de calidez le aporta un punto de dulzura y musicalidad superior a sus homólogas femeninas y las vuelve más acertadas y naturales. Sin duda, la afinación es más apropiada en la primera mitad de los medios, siendo más arriesgada en esa segunda mitad. Está claro que esa parte superior aporta beneficios a nivel de transparencia, claridad, apreciación de la definición y la resolución. Pero, es cierto que, en esta ocasión, se trata de una zona forzada para llegar a este fin, aunque asumiendo un compromiso, dado el nivel de precios. El resultado es una zona media-alta más comprimida, empujada hacia el oyente, mientras que la zona media-baja es más realista, tanto en comportamiento, como en timbre. La combinación de ambas partes puede llegar a ser elocuente, incluso polarizada en resultado. Pero queda claro que si uno busca una representación explícita, pero sin sobrepasar los límites, la experiencia auditiva que exponen estos Piccolo, es bastante jugosa, incluso disfrutable.

 

 

Agudos

 

La sensación de compresión se siente más evidente en los agudos. Los Piccolo tratan de condensar la zona alta es un fogonazo inicial. Eso implica una tendencia a aglutinar el timbre en esta primera parte. De esta forma, los agudos suenan de una forma parecida, enfocada en un punto. Al principio, se siente crujiente y chispeante, también en un primer plano, con una energía evidente e, incluso, penetrantes, faltos de delicadeza. Pero, también son un poco secos. La consecuente caída dificulta una sonoridad más extendida y realista. La energía que pierden no se sustituye por calidad y se vuelven más bruscos, abruptos, llegando a ser descuidados, poco agradables en aquellas composiciones críticas en la zona alta. En esta ocasión, esa zona de control no ha sido bien recreada y se ha convertido en una chispa condensada, recortada y un poco desnaturalizada.

 

 

Escena, Separación

 

En un sonido que posee unos planos cercanos y frontales, la escena no es muy profunda, ya que cuesta estratificar el sonido. Los graves hacen un buen trabajo para intentar ensanchar la escena y ganar distancia. Pero los medios-altos y agudos acercan al oyente a instrumentos, voces femeninas y detalles. La música se vuelve salpicada y los matices brotan algo forzados, aunque, ahí están, cuando en otros IEMS no aparecen. La lateralidad es promedio y no se atisba mucha altura. El sonido no es difuso, existe un buen nivel de definición y resolución, aunque no hay mucho aire o separación. Tampoco se demuestra sensación tridimensional o envolvente. Pero tampoco se le puede pedir mucho a unos IEMS de este precio. Sin duda, las mejores bazas son el nivel de detalle y definición, aunque resulte algo forzado y buscado.

 

 

Comparaciones

 

TKZK Ouranos

 

Es cierto que los TKZK Ouranos cuestan 55$, 20$ más que los Tripowin Piccolo. Pero pienso que son una versión refinada de estos que ahora estoy reseñando. Los Ouranos vienen con algunos más accesorios y un cable ligeramente superior, aunque su manejo no me gusta mucho. En cuanto a construcción, los Ouranos son de resina, mientras que los Piccolo son metálicos. Los Ouranos son muy cómodos y pesan muy poco. Su integración en mis oídos es bastante completa. Los Piccolo son cómodos pero se nota su peso superior, también su inserción más flotante y no tan anclada.
En cuanto a sonido, los Piccolo se mueven más fácilmente. Un cambio rápido entre ellos demuestra la suavidad musical de los Ouranos, su mayor refinamiento, aunque es algo más oscuro. Sin duda, se trata de una clara muestra de que las respuestas de frecuencia pueden engañar: puede parecer que los Ouranos tengan medios-altos más excitados y agudos. Pero no es así, son claramente más suaves y controlados en medios y agudos. Es cierto que necesitan algo de potencia para brillar, en relación a los Piccolo, pero ahí esta el control y musicalidad de su conjunto.
En una batalla directa sorprende la calidad de los graves de los Piccolo, así como su golpeo preciso, conciso y marcado. También son más ajustados que en los Ouranos. Los TKZK son algo más gomosos, también más profundos y oscuros. Su textura es más notoria, rugosa y agradable a los oídos, proporcionando ese cosquilleo característico que resulta tan atractivo. Los graves de los Piccolo son más rápidos, tienen menos poso y energía. Existe un poco de coloreo más brillante en su golpeo, lo que le da un timbre algo más sintético. Pero, insisto en la calidad de los graves de los Tripowin.
En la zona media la cosa cambia. La calidad de los Piccolo es decreciente. Sus medios son explícitos, expuestos, se sienten en primer plano, con menos delicadeza y control. Existe una definición forzada por la claridad de sus medios-altos y agudos, algo que no está presente en los Ouranos. Mientras que los TKZK son más suaves y musicales, con una mejor mezcla de voces, instrumentos y detalles, más armoniosa y equlibrada. Hay más cuerpo, volumen y escena en los Ouranos. Su exposición más relajada amplía la escena, siendo ésta más fluida, tridimensional y etérea. Existen más planos, estratificación y lateralidad en los TKZK, su sonido más expansivo contrasta con la música en primer plano de los Piccolo. Queda claro que los detalles saltan a la vista en los Tripowin, pero la compresión de su sonido repercute en los agudos. Los Ouranos son un ejemplo de una afinación similar en la parte alta, pero mejor resuelta, con mejor control, timbre y suavidad.
Que nadie se extrañe, a mi juicio, los TKZK Ouranos están muy bien para su precio. Me gusta su afinación, aunque que sé que a muchos otros les gusta otro tipo de afinación. Los Tripowin Piccolo tienen una curva similar y eso justifica su comparativa, sobre todo porque el control, la suavidad y otros intangibles no quedan reflejados en estas gráficas. Pero, resulta encomiable la calidad que se puede conseguir por 35$, aunque es una lástima que su perfil en medios y agudos no sea más controlado.

 

 

Conclusión

 

Los Tripowin Piccolo son un conjunto de IEMS que pertenecen a una franja de precios asequibles. No son los más económicos y es por eso que su calidad no es básica, sino notable. Es cierto que en todas las franjas hay mucha competencia. Pero la tecnología avanza en favor de todos los segmentos, para mejorar la relación calidad/precio, en lo que a sonido concierne. Los Piccolo son un paradigma de buena construcción, sólida, buen diseño, notable ergonomía y mejor sonido. Su perfil en W decreciente es homogéneo en su curva. Goza de unos graves muy buenos, con unos medios y primeros agudos expuestos. Su sonido se presenta en primer plano, con detalles resplandecientes y cercanos. Concentra un buen nivel explícito, pero peca de soberbia, ofreciendo una presentación más comprimida en profundidad, que puede resultar recargada. Por otro lado, conseguir esta cantidad de detalle y nivel explícito no es fácil en este punto de precios. Todo esto, unido a la excelente calidad de los graves, pone en muchos aprietos a su competencia directa. Aquellos que busquen un sonido enérgico, descarado, potente y cercano, tienen en los Tripowin Piccolo un perfecto aliado para el día a día.

 

 

Fuentes Usadas Durante el Análisis

 

  • Aune X8 XVIII Magic DAC + EarMen ST-Amp.
  • Aune M1P.
  • Tempotec March III.
  • Burson Audio Playmate II.

 

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