Referencia Arriesgada
TRI i ONE English Review
Valoración
Pros
- Técnicamente son muy buenos.
- Nivel de definición y resolución.
- Calidad de los graves.
Contras
- Perfil polarizado en W, que se aleja del balance y homogeneidad de un producto de referencia audiófila.
- Sonido penetrante en los medios-altos y primeros agudos, que puede llegar a fatigar.
- Su diseño no encaja en la morfología de mis oídos.
- Embalaje exagerado en tamaño.
Enlace de Compra
https://keephifi.com/products/tri-ione
https://es.aliexpress.com/item/1005004910383965.html
Enlace a la Tienda
https://kbear.es.aliexpress.com/store/5017064
Introducción
Como muchos ya saben, TRI es algo así como la marca premium de KBEAR. En esta ocasión, voy a revisar los i ONE, que son el producto tope de gama que usa un único controlador dinámico. Miembro de la serie i, se trata de un producto que supera los 300€ de precio. Utiliza un potente imán N52 NdFeB para su driver de 10mm con diafragma de carbono PET. Ha sido fabricado en aleación de aluminio bajo una máquina CNC de 5 ejes. Su superficie está anodizada. Posee una cubierta de espejo galvanizada y usa un cristal curvo 2.5D en su cara externa. Cabe destacar también el cable, se trata de un cable TRI Wolfram de 4 núcleos OFC de plata pura blindados, que poseen un grueso recubrimiento textil. Por último, comentar que vienen con las nuevas tips de silicona TRI Clarion.
Quiero agradecer a KeepHiFi por hacer posible esta reseña y, en especial, a SenyorC, del blog:
https://espanol.achoreviews.com/
Gracias a él he podido reseñar este producto tan exclusivo.
Especificaciones
- Tipo de Drivers: Circuito magnético externo con driver dinámico de 10mm, imán N52 NdFeB y diafragma de carbono PET.
- Respuesta de Frecuencia: 20Hz – 40kHz
- Sensibilidad: 108dB@1kHz
- Impedancia: 24Ω
- Conector Jack: 3.5mm chapado en oro
- Tipo de Conexión de la Cápsula: 2Pin 0.78mm
- Material de la cápsula: Aleación de aluminio.
- Longitud del cable 120cm ± 3cm.
- Material del cable: 4 núcleos OFC de plata pura blindados.
Presentación y Contenido
Los TRI i ONE vienen en una caja enorme, de dimensiones 240x169x69mm. Es blanca. Las pocas letras que hay son grises. Delante solo i ONE y un lema. Detrás unas pocas especificaciones en varios idiomas. Se abre como un libro, pero tiene solapas hacia un lado y otro. En la solapa derecha hay una fotografía BN del suelo de lo que podría ser un escenario de una banda de música, o de un estudio. El color interior es naranja chillón. Hay una lámina con otra fotografía, esta vez, en color, de un ciervo. Arriba está el logo de TRI. El interior es de espuma recubierta de terciopelo. Hay varios departamentos en donde están las cápsulas, un par de cajitas de cartón naranja con el cable, y otros accesorios. Las tips están en blísteres dedicados y, por último, hay una gran caja de piel naranja. El resumen del contenido es el siguiente:
- Las 2 cápsulas TRI i One.
- 1 cable.
- 1 cepillo.
- 1 gamuza verde.
- 1 blíster con las Clarion Tips, tamaños SxMxL.
- 1 blíster con las Balanced Tips, tamaños SxMxL.
- 1 estuche de piel.
- 1 bolsa de tela para proteger las cápsulas.
El embalaje es muy grande, haciendo honor a su condición premium, pero es exagerado.
Pese a que la caja de almacenaje es grande, el cable hace que sea ligeramente complicado guardar el producto en su interior. Se agradece la bolsa para proteger las cápsulas, pero es poco práctica. Solo para aquellos que sean muy meticulosos en este sentido.
Construcción y Diseño
TRI ha querido desmarcarse un poco y ha arriesgado en el diseño, sobre todo, en el tamaño de la cápsula y con la protuberancia del borde. Pero comentaré este aspecto en el siguiente apartado.
Las cápsulas están hechas de aleación de aluminio y su superficie es micro arenada brillante, muy vistosa y llamativa. El logo está el borde, junto a la conexión de 2Pin. Cerca, en la cara externa hay dos agujeros. Hay otro agujero en la base de las boquillas. Éstas poseen tres niveles y está protegida por una pieza metálica perforada. La cara externa tiene un cristal 2.5D, con una superficie espejo. El nombre del modelo está escrito en su interior y posee un patrón realizado en una mitad, con rectángulos verticales de distinta longitud.
El cable se llama TRI Wolfram y const de 4 núcleos OFC de plata pura blindados. Posee un recubrimiento textil para cada hebra y es bastante grueso. El conector es de 3.5mm chapado en oro. Su funda es metálica, de forma hexagonal y negra. Trae el logo y la marca en tinta blanca en una de las caras. La pieza divisora es igual, aunque más corta. El pasador es una anilla negra metálica. Los conectores son cilindros negros con anillas biseladas en azul y rojo brillante y pulido, todo metálico. La conexión de 2Pin 0.78mm está montada sobre una placa de plástico duro traslúcido.
La forma de las cápsulas se asemeja a un triángulo de esquinas redondeadas. La supuesta cara del cateto mayor, posee dos partes planas de desigual tamaño. En conjunto, se trata de una cápsula pequeña aunque gorda. La cara interna no es plana, ni redondeada. Han querido hacer una curva creciente que termina en un borde/protuberancia que se ancla por encima del pliegue del pabellón. El problema es que esta cápsula es pequeña y no termina de encajar en mi morfología.
No entiendo como un cable y un producto premium no tiene opción de clavija balanceada.
En general, el aspecto es realmente premium, muy cuidado y muy bien acabado. El diseño es elegante, pero falla en la ergonomía aplicada a mi morfología particular.
Ajuste y Ergonomía
Por culpa de lo comentado anteriormente, la protuberancia de anclaje no llega a su destino. Por longitud, no supera mi antihelix. Es más, choca directamente contra él, produciendo una molestia continua. Por otro lado, la elección de las tips no ha sido fácil. He tratado de encontrar algunas tips que permitieran una inserción más profunda, con la intención de que las cápsulas “flotaran”, para alejarlas de mis oídos, lo suficiente para que no hubiera contacto con el antihelix. He podido encontrar unas tips bi-flange muy grande de los antiguos Rose Mini2 MKII 2.0. Con ellas he conseguido el mejor sonido y el mejor ajuste, pero no es nada cómodo este diseño.
El peso del cable y su grosor tampoco favorece la comodidad. Así que este apartado tiene un claro suspenso, al menos, en mi caso particular. Y no es que tenga una morfología especial, ya que lo normal es que no tenga casi nunca problemas en este aspecto. Por poner un ejemplo, los Campfire Solaris, debido a su gran tamaño, no podía llevarlos más de media hora. Con eso quiero decir que estas cosas pasan hasta en las mejores casas.
Sonido
Perfil
Se podría decir que los TRI i ONE poseen un perfil en W porque posee tres picos claros en su respuesta de frecuencia. El primero está ubicado en el subgrave, el segundo sobre los 2.5kHz y el tercero sobre los temidos 5kHz. La conjunción de los dos últimos picos, que están al mismo nivel, hacen que el sonido vire hacia el brillo. Se intenta compensar con un subgrave poderoso, pero la doble excitación de la segunda V, hace que el sonido sea predominantemente “luminoso”, por no decir otra cosa.
Por otro lado, comentar que, a mi juicio, este perfil no es el más adecuado para unos IEMS premium que son la referencia de la marca. Siempre que pienso en un modelo tope de gama me imagino una respuesta de frecuencia más equilibrada, homogénea y, habrá que decirlo, audiófila.
Graves
Hay que reconocer que TRI ha sabido hacer un buen driver dinámico para los graves. Cualitativamente hablando es muy bueno. Posee prácticamente todo lo que se espera de él: potencia, pegada, profundidad, respuesta sensorial, contundencia, presencia, limpieza, velocidad, estratificación y dinamismo. Tan solo hecho de menos un poco más de textura, que sea un poco más sensorial y más profundo, si cabe. Es ágil en su ejecución, rápido en su desaparición, apenas hay poso, es limpio con los medios y es muy capaz con los pasajes complejos. Su habilidad se demuestra en malas grabaciones, con graves sin filtrar, con líneas de bajos complicadas y difíciles de ejecutar. Los i One no han tenido ningún problema en afrontar este tipo de desafíos y los ha solventado todos de manera ejemplar. No hay ningún atisbo de duda, ni rumor indeseable, ni distorsión. Además, es capaz de soportar un buen nivel de volumen sin quejarse en absoluto. He sometido a estos TRI a pruebas duras de graves, donde muchos de mis IEMS de mi colección sufren sobremanera. Mientras que los i ONE siempre han respondido de forma ejemplar. Parece que eso debería ser la norma. Pero mezclar un volumen alto, con graves sucios y casi exagerados, no siempre es una buena combinación para los IEMS. Y es ahí donde debo valorar estos TRI con una nota excelente en este apartado.
Tampoco puedo olvidar el nivel de precisión, definición, detalle, incluso la luz y claridad de la zona. Cualidades que, sin duda, confirman el valor de un gran driver dinámico para graves.
Medios
La afinación en W pronunciada no es la mejor para representar la zona media. Tras un descenso destacable desde el subgrave, la desigualdad entre la zona más baja de la primera mitad y la más alta de los medios-altos, es de 14db aproximadamente y según mi propia medida. La primera parte del rango central sufre estas consecuencias y se nota la lejanía de su presentación. Esto es algo que se aprecia en las voces masculinas y en la instrumentación de esta zona. Tanto las baterías, parte de las guitarras, instrumentos de viento-metal y algunos otros instrumentos de cuerda, además de las voces masculinas, pueden sonar un poco blandas, ligeras, alejadas, carentes de fisicidad y cuerpo. Poseen un timbre brillante y falto de sedimentación. Sin embargo, están muy bien articulados y cuando están solos se aprecia una notable ejecución, con buenos matices, detalles, incluso textura. Pero le falta una base más densa y una proyección más emancipada. Las voces femeninas pueden llegar a ser penetrantes y punzantes, así como las frecuencias superiores de dichos instrumentos, además del resto. Algo que ocasiona cansancio, incluso molestia, en ocasiones. No se trata de unos IEMS que elegiría para escuchas largas.
Por otro lado, la sobre exposición de medios-altos y primeros agudos, hace que cuando éstos entran en juego, los micro detalles de los medios inferiores queden detrás, llegando a perderse. Se trata de un driver técnico, con muy buena resolución, algo que hace que los medios sean muy detallados. Pero la afinación no le permite dar el paso a la excelencia, ni extraer todo el potencial que posee. De esta forma y según sea el género o, incluso, la canción reproducida, los i ONE pueden ser muy buenos o sonar huecos, por la lejanía de la primera parte del rango medio y la presencia más elevada de graves, medios-altos y primeros agudos. De esta forma, el gran trabajo realizado por el driver, se diluye por un perfil desequilibrado y enfocado en ciertos rangos de frecuencias.
A pesar de todo esto, no se trata de un IEM que destaque más los detalles que la base. En este caso, pese a la baja densidad de la presentación de los medios, no es un IEM claramente analítico, si bien es notable técnicamente hablando, en cuestiones de precisión, velocidad, agilidad y dinámica. Pero la baja homogeneidad de este rango evita un lucimiento mayor y una exposición más equilibrada de toda la música.
Agudos
Los agudos vienen precedidos de unos medios-altos excitados y presentan un chispazo inicial elevado. Luego, se produce una caída relativamente clara, una manera clásica de controlar la zona. De esta forma, la presentación es fulgurante, brillante, crujiente, llegando a ser punzante y marcada en ocasiones. Las sibilancias se mantienen en el borde, en el límite de lo aceptable. Pero hace que el sonido sea fatigante y expuesto. La extensión es simplemente buena, aunque la sensación de aire no es muy elevada. Así es como el agudo es penetrante, poderoso, pero enfocado en la primera parte. Pierde delicadeza, nuevamente por esta presencia particular y afecta al resto de frecuencias centrales, porque se sobrepone a ellas.
De nuevo, técnicamente muy competente, los detalles agudos si están presentes, aunque enmascaran esos matices de los medios, por su nivel superior de exposición y cercanía.
Escena, Separación
La escena se muestra ancha, tiene buena altura, pero en la media de su precio. La profundidad lucha con la cercanía de los medios-altos y primeros agudos. Éstos anclan la escena, acercándola en demasía. Los detalles que deberían ser más volátiles, se presentan en primer plano, muy cercanos al oyente. Mientras que parte de la instrumentación y voces están en una media distancia que no es real. Se pierde sensación de aire por ese apego de los matices y se invierte el orden lógico/natural de la presentación. La puesta en escena se siente algo forzada en ese sentido, pese a que la claridad es muy elevada, así como el nivel de transparencia. Muy bueno técnicamente, en aspectos de resolución y definición, se pierden matices dependiendo de los rangos de frecuencia, por superposición de esas frecuencias, sobre otras. La separación también es notable, pero esa segunda mitad de medios-altos y primeros agudos aglutina la información y la concentra, generando una exposición un tanto desigual. De nuevo, dependiendo de canciones todo puede variar, así que no son buenos todo terrenos. Se trata de unos IEMS selectivos con los estilos musicales y canciones.
Comparaciones
TFZ Tequila PRO
Me gusta comparar perfiles similares para poder determinar diferencias entre IEMS y poder valorarlos mejor. En este caso, no tengo nada más parecido que los TFZ Tequila PRO. Su respuesta de frecuencia es muy similar. Mientras que los TFZ se pueden encontrar por 179$, los TRI están por 249$.
Empezando por las cuestiones de diseño y construcción, los TFZ me gustan mucho y están completamente construidos en metal. Se trata de un diseño cilíndrico de un buen diámetro, cuyas boquillas están inclinadas. Tampoco está exento de polémica en su ergonomía, pero debo comentar que a mí me encajan perfectamente. Sin embargo, los TRI, como ya he comentado, poseen una ergonomía mucho peor para mí, más molesta y menos compatible con mi anatomía. Pese a lo bonitos que son los i ONE, me quedo con la mezcla de simplicidad y elegancia de los TFZ.
El perfil es tremendamente parecido, ambos poseen una afinación en W, ambos montan drivers dinámicos. Los TFZ albergan un driver dinámico con grupo magnético Tesla y diafragma de diamante de 11.4mm. Por otro lado, los TRI i ONE poseen un circuito magnético externo con driver dinámico de 10mm, imán N52 NdFeB y diafragma de carbono PET. Los TFZ se caracterizan por necesitar muy poca potencia para ofrecer un gran rendimiento sonoro. Los i ONE son más duros de mover, aunque tampoco demasiado. Pero las diferencias son claras en este sentido.
Si algo sabían hacer bien en TFZ eran drivers dinámicos para graves. En ese sentido, TFZ siempre ha sido una referencia. Y le pone las cosas muy difíciles a una gran zona baja como la de los i ONE. Siendo sincero y tras muchas pruebas y comparaciones rápidas, podría decir que los TFZ son ligeramente superiores. El grave es más conciso y apretado, mientras que los TRI son sutilmente más gomosos. Ambos poseen un comportamiento, presencia, ejecución y timbre muy similar, pero pienso que los TFZ suenan un poco más sensoriales y los i ONE suenan más redondeados. Pero hay muchas más similitudes que diferencias. En el límite, los i ONE poseen un punto técnico superior, con algo más de control, precisión y resolución. Mientras que los TFZ tienen un punto de mayor visceralidad, pegada, llegando a mover más aire, aunque también retumba más.
La competencia técnica de los TRI se demuestra en los medios. Los TFZ suenan un poco más turbios y matizados, algo que se puede sentir en las voces masculinas. Mientras que los TRI siempre mantienen mucha claridad, transparencia y definición, los TFZ se sienten con menos resolución, aunque el timbre es más agradable, comparativamente más cálido y no tan brillante. Pese a la pérdida técnica, es más musical y agradable. También posee un poco más de cuerpo y densidad. En los medios-altos sucede igual: los TRI me siguen pareciendo más penetrantes. Al ser más analíticos, al tener más definición y resolución, sus notas son más finas, más separadas, pero también más punzantes. En ese sentido, son más exigentes y duros en una zona especialmente sensible. Con mayor pericia técnica, siendo más apropiados para la monitorización, los TFZ son un poco más homogéneos y permisivos.
En la zona alta se mantienen algunas cosas, los agudos de los TFZ son más redondos, un poco más lineales y extensos. Mientras que en los TRI son más finos, suenan más agudos, crujientes, brillantes y delgados. De nuevo, se mantiene el patrón de tecnicidad vs musicalidad, si se puede permitir esta analogía en un perfil en W claramente exaltado.
Los i ONE, al ser técnicamente superiores, son capaces de dar un paso más en la recreación de detalles, llegando a un punto más micro. A nivel comparativo, los TFZ son un punto más redondos, pero el hecho de que sean menos penetrantes y algo más “balanceados”, les permite ofrecer una paleta de detalles en otras frecuencias, en la que los TRI se superponen.
En el punto de precio de los i ONE, les exijo mayor cantidad de escena. En este aspecto, ambos son similares. Pero la mayor separación, volatilidad y finura de las notas, ofrecen una sensación más libre en los TRI. Aunque parece que hay mayor profundidad en los TFZ. Comparado uno a uno, los TRI son mejores en escena, en separación, claridad y transparencia, ofreciendo una sensación de ocupar más espacio. Los TFZ parecen más conjuntados y densos, su mejor homogeneidad suaviza la exposición, reduciéndola comparativamente hablando.
Teniendo el perfil cubierto con los Tequila Pro, yo no compraría los TRI i ONE, a no ser que me gustara mucho el perfil y buscara una superioridad técnica, teniendo en cuenta que su ergonomía podría o no, encajar en la morfología de cada uno.
Conclusión
Anteriormente, he analizado productos de TRI que me han gustado mucho, como los Meteor, los KAI y el DAC/AMP TK-2. Y realmente esperaba que los nuevos i ONE fueran un gran producto, a la altura de su precio y condición de producto tope de gama. Pero pienso que TRI a arriesgado. Primero, porque los i ONE tienen un diseño que hace que su ergonomía no sea universal. Habré probado como 100 IEMS y solo unas pocas unidades no me han encajado bien. Los TRI i ONE han sido uno de ellos. Segundo, poseen un perfil en W bastante marcado, que lo aleja del equilibrio y la homogeneidad que yo esperaría de unos IEMS de referencia.
Los TRI i ONE son técnicamente muy buenos, diría que excelentes. Con una capacidad de ejecución, definición y resolución totalmente acorde a su precio, incluso superior. Pero pienso que su perfil lastra el verdadero potencial del driver que posee y me deja con las ganas de saber hasta dónde podrían haber llegado, con una afinación más homogénea y balanceada en su rango central. Por otro lado, todo esto se trata de una opinión personal, porque si a algún aficionado le encaja el perfil de los i ONE, difícilmente podrían encontrar algo mejor.
Fuentes Usadas Durante el Análisis
- Aune Flamingo.
- Earmen Angel.
- TempoTec Variations V6.
- Hidizs AP80 PRO-X Red Copper Limited Edition.
- ACMEE MF02s.