El Transformer TodoTerreno
Dunu Titan S English Review
Valoración
Pros
- Perfil agradable, equilibrado y musical, bastante todoterreno.
- Sonido y timbre natural.
- Escena aireada, con buena sensación de apertura.
- Gran término medio, no hace nada mal.
- Muy buen embalaje y accesorios.
- Gran diseño y nivel de construcción.
- Excelente relación calidad/precio.
Contras
- Quizás le falte algo más de elevación en el subgrave para mejorar la fórmula.
- El estuche es un poco plano.
- Pese a que el cable es manejable y cómodo, puede mejorar.
- El uso de cualquier otro cable rompe la estética integrada que ofrece el cable de serie.
- Pese a que no hace nada mal, tampoco se especializa en nada, no hay un aspecto del sonido en el que sea verdaderamente muy bueno.
- Falta de profundidad y altura en la escena.
- No existe posibilidad de elección de cable balanceado.
Enlace de Compra
https://www.dunu-topsound.com/titan-s
Enlace a la Web
https://www.dunu-topsound.com/
Introducción
La veterana marca de auriculares Dunu, que lleva en la brecha desde 2006, pero cuyas raíces llegan hasta el 1994, sigue innovando para los amantes de la música, como ellos mismos dicen. Pero una marca que lleva el apellido “TopSound”, siempre me ha dado que pensar. ¿Se trata de una denominación pretenciosa o de un alto nivel de autoexigencia? Sin duda, me atrevo a escribir que se trata de lo segundo. Cada nuevo modelo que presente Dunu levantará, siempre, muchas expectativas. Será revisado, minuciosamente, tanto por tiendas, como revisores y aficionados. TopSound implica este nivel de exigencia. Dunu ha sabido generar esta perspectiva de salida y, a su vez, presentar modelos siempre interesantes y a la altura de las demandas. Este es el resumen de la filosofía de los nuevos Titan S. Desde la parte del diseño supone una imagen iconoclasta, incluso dentro de su catálogo. Tanto su soberbia construcción, como su atrevido diseño, llaman poderosamente la atención. Este es un punto de vista. El siguiente apartado que separa a Dunu de muchas otras marcas, es su embalaje y nivel de accesorios. En lugar de optar por una caja grande y semi vacía, se conforma con un envoltorio que destaca las formas de su nuevo producto, pero ajustado a lo que ofrece: no es mucho más grande que el gran estuche con cremallera que trae. El nivel de detalle y protección de sus elementos no lo he encontrado en otros modelos de este rango, o del inmediatamente superior. Hasta las cápsulas vienen envueltas en pequeñas bolsas zip, para que no sufran el más mínimo daño, hasta que lleguen a las manos del cliente. Por último, está el sonido. Y ésta es la parte más compleja. Como gran marca, los ingenieros y afinadores tienen que tener una idea, que puede moldearse con las tendencias actuales del mercado, así como recoger las múltiples peticiones de los aficionados. Está claro que no se puede crear un sonido universal y que cada firma puede ser única. Pero el verdadero conocimiento y habilidad de cada marca, está en conjugar sabiamente todos estos conceptos. Entonces ¿Qué ha conseguido Dunu con este nuevo modelo? Por lo pronto y a todas luces, un diseño sumamente atractivo y muchas otras cosas que veremos a continuación.
Especificaciones
- Tipo de Drivers: Transductor dinámico de 11mm, con un diafragma de polímero de cristal líquido (LCP) multicapa, una bobina móvil CCAW ligera e imán interno N52.
- Material de la Cápsula: Aleación de zinc de alta densidad.
- Respuesta de Frecuencia: 5 Hz-40 kHz
- Sensibilidad: 110 ± 1dB @1kHz
- Impedancia: 32Ω @1kHz
- Distorsión Armónica Total (THD): <0.3% @1kHz
- Conector Jack: 3.5mm TRS Single-Ended
- Composición del Cable: Cobre monocristalino de alta pureza y cobre chapado en plata.
- Longitud del Cable: 1.2m ± 0.1m.
- Tipo de Conexión de la Cápsula: 2Pin 0.78mm
- Peso neto: 17g
Presentación y Contenido
Los Dunu Titan S vienen en una casi pequeña caja, de dimensiones 134x97x70mm. En la cara principal se muestra una imagen real de las cápsulas, sobre una superficie salpicada. En el fondo, se muestran unas barras verticales que parecen neones rojos y azules. En la esquina superior izquierda está el logo de la marca y el nombre del modelo, en letras blancas. En la esquina inferior derecha está el logo Hi-Res. En la cara trasera, se resaltan los neones rojo y azul, así como las salpicaduras de agua, en una imagen bastante difuminada. El nombre del modelo sigue destacando en la parte superior, con letras blancas y mayúsculas. Justamente debajo, hay 4 códigos QR. Después están las especificaciones del modelo, en inglés y chino. Por último y al pie, están las señas de la marca, los códigos con las distintas certificaciones que posee el producto y un EAN13.
Una vez retirado el cartoncillo exterior, aparece una caja completamente negra, con el logo de la marca en el centro, escrito con letras blancas. Tras levantar la tapa se muestra un gran estuche en símil piel, de vivo color azul. Posee el logo marcado en el centro, cerca de la cremallera dorada. Ésta puede abrirse fácilmente gracias a un generoso lazo de igual material que el propio estuche. Detrás hay una pequeña tapa de cartoncillo negro, marcada con “Dunu”, que alberga el resto de accesorios. En resumen:
- Las cápsulas con el cable y un par de tips de silicona tamaño mediano, de núcleo rojo.
- Tres pares de tips de silicona de núcleo azul, tamaños SxMxL.
- Tres pares de tips de silicona gris traslúcido, tamaños SxMxL.
- Tres pares de tips de silicona de núcleo rojo, tamaños SxMxL.
- Una pinza para la ropa.
- Tarjeta certificado de garantía.
- Manual de instrucciones.
Las cápsulas con el cable vienen dentro del estuche. Todo este conjunto está protegido por una bolsa zip. Además, cada cápsula está, a su vez, protegida por otra bolsa zip más pequeña.
Cada conjunto de tips de silicona vienen en una bolsita blanquecina sellada.
El cable viene unido a las cápsulas y tiene una cinta de goma para recogerlo.
Quiero destacar que no es necesario un tamaño de embalaje desmesurado, para incluir un eficiente número de accesorios, así como un cuidado excepcional en la protección de los elementos que constituye el producto.
Creo que hay muchas marcas que deberían aprender de qué se puede hacer con una presentación de unos IEMS, por debajo de 100$. Dunu realiza un esfuerzo creativo en cada modelo y añade unos accesorios fantásticos, como el estuche con cremallera de este modelo. Y todo eso, sin menoscabar en la calidad del sonido, ni en la construcción del producto. Ni, por supuesto, en su diseño. Digno de admiración y elogio.
Construcción y Diseño
Mucho he leído sobre la estética de los Titan S. Pero a mí me recuerda aquellos gigantes de metal de los dibujos animados, que veía de pequeño. Desde Mazinger Z, hasta los Transformers… Hay algo de diseño “Mecha” en las cápsulas, o esa es mi humilde opinión. Las cápsulas han sido construidas con una aleación de zinc de alta densidad. Su cara externa tiene similitudes con una especie de forma triangular, de esquinas limadas. El interior de la cara está perfilado como una espiral que se proyecta hacia los cables y termina en en centro de la cara, en una rejilla redonda, micro perforada, superpuesta gracias a una doble corona de plástico negro. Esta cara posee hasta cuatro niveles distintos de planos. Casi en el centro del lado corto, entre la rejilla y el conector plástico del cable, hay un vistoso tornillo Torx negro. El metal está cepillado en esta cara y la marca Dunu está escrita entre la esquina biselada y la rejilla. La cara interior es más lisa y redondeada. Un nervio suave casi la divide en dos partes. Hay una letra inscrita dentro de un círculo, para indicar el canal. Llegado al pie de las boquillas existe un orificio, que sorprende por su tamaño: no es precisamente pequeño, aunque tampoco es tan grande como la marca del canal, pero es muy obvio. A través de él puede verse como una maya de tela tupida y blanca. Las boquillas son largas (casi 6mm) y poseen 4 niveles. El más cercano a la base es un tope, las tips no deben taparlo, su diámetro es 6.5mm. El siguiente nivel es inferior, algo mayor de 5mm. El tercer nivel es un anillo inclinado, cuya base es de mayor diámetro (5.6mm) para terminar en el exterior de la boquilla, de 5.1mm. El interior está protegido por una densa rejilla metálica.
La conexión de 2Pin 0.78mm está embutida en el cuerpo metálico. Así que el cable tiene una pequeña superficie cuadrada, de esquinas ligeramente redondeadas, que se encajan a la perfección en dicho hueco. Estas piezas tienen el color de cada canal. Encima de ellas hay una pieza de plástico gomoso y duro, de color negro, que sigue la forma trapezoidal redondeada de las cápsulas, hasta llegar al cable. Una vez puesto el cable, parece que el conjunto sea solo una pieza, ya que las formas poseen una continuidad que encaja perfectamente en el diseño.
El cable posee guías semi rígidas sobre oreja, formadas por un recubrimiento plástico transparente, ligeramente endurecido. Mide 1.2m y está compuesto por 4 hebras enrolladas en espiral. Su material es cobre monocristalino de alta pureza y cobre chapado en plata. La pieza divisora es un cilindro metálico negro, con la marca en letras blancas. Los bordes están sutilmente rebajados, se puede ver el color real del material. El pasador es un pequeño cilindro de plástico traslúcido, doblemente agujereado. El cable puede recogerse gracias a una cinta de goma negra. El conector es acodado, de 3.5m SE, chapado en oro.
A nivel interno, el Titan S monta un driver dinámico de 11 mm, con un diafragma de polímero de cristal líquido (LCP) multicapa, una bobina móvil CCAW ligera e imán interno N52.
El diseño es único y muy especial, da la sensación de tener entre las manos un modelo mucho más caro. Cualquiera que vea estos IEMS, puede esperar que se trata de algo muy exclusivo y singular. La integración de las formas con la funda del conector del cable, hace que se rompa la estética continuista, si éste se cambia. Quizás sea este cable el punto más débil del conjunto: no hay opción balanceada y parece un poco fino. Aunque es realmente cómodo, suave, no se enreda y no tiene rigidez alguna. El pasador roza la perfección y la cinta de ajuste de goma, pese a que es un clásico, no encuentro que sea totalmente eficaz.
Como conclusión, el binomio construcción/diseño está al alcance de pocas marcas, para un producto de este rango.
Ajuste y Ergonomía
Puede parecer que una cápsula con una forma tan particular deber ser mortalmente incómoda. Nada más lejos de la realidad. Aunque por fuera parece angulada, por dentro posee una cara muy suave y redondeada. Las esquinas y los bordes del interior son mucho más sutiles, apenas rozan con alguna parte de la oreja. La boquilla tiene una proyección alargada, así que se puede asumir una inserción media. Usando tips de canal bastante ancho, se podría cubrir el tope de la base de 6.5mm y convertir la inserción en superficial. Este es mi caso y ni así encuentro que las partes externas me molesten. Con tips normales, las capsulas parecen flotar en el pabellón y el roce es casi inexistente. Prefiero la inserción superficial, usando tips de gran canal interno, acercando la boquilla al borde de las mismas, consiguiendo un aislamiento superior, por el grosor de las tips. Al acercar la boquilla al exterior de las tips, se consigue una sensación de cercanía en los detalles, mayor apertura de la música, que unido a la presión que ejercen mis tips caseras, rellenas de foam, consigo un sonido muy pleno en la zona baja, además de ese plus de aislamiento. Las ventajas de un buen diseño de boquilla permite usar varias tips y ajustes. Muy bueno.
Sonido
Perfil
El perfil de los Dunu Titan S es equilibrado, con una tendencia hacia la neutralidad, mezclada con un énfasis en los medios-altos que le aporta claridad y transparencia, además de un cierto punto de chispa. Por otro lado, la sutil linealidad de la parte baja añade un ligero aire cálido en algunas situaciones. No se trata de un perfil brillante, ni puramente neutro, ni posee un predominio de calidez, sino que existe una buena conjunción de cada elemento para proporcionar un sonido natural, agradable, musical y con un buen timbre, balance y equilibrio.
En cuanto a su respuesta vs potencia, no se trata de unos IEMS difíciles de mover, pero sus 32Ω demandan algo más de energía para responder con mayor brío. He necesitado un poco más de potencia para nivelar volúmenes frente a su competencia más directa.
Graves
Los Titan S son integrantes de la clase de los graves académicos. Esto es, una zona baja con un dibujo que busca la linealidad, pero se enfatiza sutilmente en el inicio del medio-grave, aportando una suave calidez, pero perdiendo cierta presencia en el extremo inferior. Aun así, las LFO poseen una representación ligera, pero adecuada, que huye de la mera muestra testimonial. El extremo inferior no ruge con fuerza, pero su sonoridad es muy realista y natural. La representación de los tonos puros de muy baja frecuencia se realizan realmente bien, produciendo una vibración agradable y exenta de coloreo, muy acorde a la realidad y a esa reproducción fidedigna y académica, a la que hago referencia al principio del párrafo. El golpeo de los bombos es seco, contenido, preciso y ágil, aunque no es muy animado. Quiero decir que los Titan S no se muestran eufóricos por manifestar toda su técnica, clase, ni mucho menos, pegada, a no ser que se le exija. No se trata de un grave miedoso, yo diría que tiene un carácter algo modesto, prudente, cauteloso, incluso tímido. Pero no debería ser así. Me hubiese gustado algo más de énfasis, garra, fuerza y energía en este rango, porque no le falta ni capacidades técnicas, ni sonoras. Sin embargo, la zona baja se sigue comportando como ese chico bueno que trata de no molestar, que trabaja en la sombra y que predica con el ejemplo. De esta forma, los graves son presentados de una manera suave, aunque eficaz, poseedores de una agradable textura, cuya rugosidad sutil se llega apreciar con claridad, demostrando una dulzura natural y sedosa. El decaimiento de las notas es acorde a esta idiosincrasia y el poco poso que se observa deja un gran sabor de boca, incrementando un recuerdo que persigue algo más, pero que nunca llegará. Tanto la laminación de los graves, como la generación de las capas es tenue, dibujando una estratificación real, pero leve. Este hecho alimenta esa sensación sugerente que poseen los graves de los Titan S, pero a su vez, limitan la percepción de una profundidad más acentuada. Si me permiten el símil futbolístico, los graves de los Titan S son como aquel jugador de fútbol que nunca acaba de explotar, pero que a veces aporta tardes de gloria. Por su oficio y sacrificio, siempre es bueno tenerlo en el equipo.
Medios
Y teniendo un gran compañero en la zaga, en la media se juega mejor. Este “Mecha” pertenece a la división de honor y lo demuestra con su rango central. Su buen hacer se refleja en la representación de una zona basada en una suavidad bien perfilada: es agradable en su zenit, pero explícito en el resto de puntos. Se trata de una respuesta mesurada que no esconde su carácter, ni su naturaleza clara, limpia y transparente, pero que nunca se siente hiriente. El sonido sigue persiguiendo ser dulce, aunque aquí sí que existe una exaltación más declarada, que nunca supondrá un problema. De esta forma, las sibilancias se intuyen, pero nunca se muestran persistentes, ni descontroladas. Unas curvas tan redondeadas nunca permitirían tal cosa. El resultado es una zona media placentera, bien sustentada por la leve calidez inferior y su buena, limpia transición, que goza de un cuerpo natural, balanceado, ni demasiado denso, ni demasiado ligero, pero siempre presente. No encuentro oquedades en la zona media, ni grandes sobresaltos, sino una gran coherencia que produce placer y musicalidad en partes iguales. Se trata de un gran todoterreno, no es poderoso, pero sí muy fiable. Es la media que prefiero cuando no sé qué usar. Tal vez sea por su capacidad evocadora, por su timbre preciso y realista y por la presencia de sus voces. Es cierto que la ganancia de pabellón favorece una mayor corpulencia y presencia de las voces femeninas, así como un punto de mayor pasión frente a las voces masculinas, algo más ligeras y finas, pero igualmente dulces, naturales y sugerentes. No niego un trato de favor hacia estas voces, frente al resto de instrumentos, pero su presentación no es predominante. Este es otro punto que me gustaría resaltar, lo bien que los Titan S mezclan los elementos y los dispone en sus diferentes planos de presencia. Partiendo de unos graves que no se caracterizan por ser muy profundos, los medios aportan una mejor habilidad para laminar voces e instrumentos, consiguiendo separarlos y enfatizarlos individualmente, dejando, además, mucho espacio para representar detalles y matices. Esta sensación de apertura parece heredada de los primeros modelos Titan, como el 1 (que tengo el placer de poseer todavía). No se trata de ese diseño semi-abierto de aquella versión primigenia, pero seguro que esa rejilla situada en la cara externa, tiene incidencia en este sentido. La buena percepción de amplitud corrobora el aspecto de limpieza de la primera mitad de los medios, ayudándolos a ser ligeros y con cierto punto de volatilidad. Puede parecer que no hay mucho sustrato en esta parte y que la música no posee mucho músculo, ni densidad, pero de esta forma se evita cualquier sensación de opacidad y oscuridad. La parte positiva de este aspecto es que se puede convertir en una virtud, en cuanto se trata de liberar música muy compacta en esta zona, ayudando a aclarar y aligerar pasajes recargados, complejos, densos y pesados en esta transición de los graves a los medios. Lo dicho, los Dunu Titan S son ese jugador que hace equipo y que siempre está dispuesto a ayudar. Una referencia en la zona media.
Agudos
Los primeros agudos de los Dunu Titan S comienzan suavemente amortiguados. Tras unos medios-altos ensalzados, la entrada en la zona alta decae ligeramente, creando la clásica afinación de control. Como también suele ser habitual, el resto de la zona alterna picos y valles. Pero existen varios aspectos a tener en cuenta: el valle de la zona de control no es profundo y existe una notable respuesta en la zona de aire. La primera característica tiene como resultado una reproducción natural de los agudos, con un decaimiento progresivo que le aporta un cariz analógico y orgánico. Los destellos poseen una finura mesurada, no se extienden en presencia, ni energía, sino que se integran de manera coherente con la suavidad generalizada del sonido. Por otro lado, no se siente un corte drástico en la progresión de los armónicos, algo que evita un sonido concreto y seco. Por suerte, existe jugo y chispa, aunque el sonido nunca es netamente brillante. La segunda característica es la cantidad de aire existente, algo no demasiado habitual en un driver dinámico de este rango de precios, pero gratamente sorprendente. Este hecho ayuda a armonizar la zona ofreciendo una terminación vaporosa, que proporciona una sensación de volatilidad sutil y agradable.
El resultado final es una zona colateral que basa su esfuerzo en enriquecer la zona media, más que en lucir individualmente, con una excitación más remarcada o energía más prominente.
Escena, Separación
La escena destaca por su anchura, por una altura más que correcta y una profundidad más limitada. La cantidad de aire aporta vapor y una sensación etérea. Quizás, la apertura de los IEMS, con esa rejilla situada en la cara externa, también ayude a expandir la imagen y producir una sensación de escenario ovalado, que no se escapa de la cabeza. En este sentido, la sensación se mantiene natural, no forzada y nunca irreal. La recreación de pistas vocales y no demasiados instrumentos, producen un efecto más evocador, gracias a la mayor proyección de esas voces, lo que genera una escena más extendida y plena, proporcionando una grata sensación de volatilidad y expansión vaporosa.
La separación es buena, existe una neta distinción entre los elementos, gracias a la claridad mejorada y su nivel de transparencia. No se trata de un sonido analítico, con una capacidad de aislar elementos con mayor precisión, sino que el sonido posee una resolución más natural, notable, pero realista. Tampoco se trata de un sonido cohesionado, unido por la suavidad de su reproducción, sino que es más libre y limpio, más separado y discernible, pero sin ofrecer una distancia profunda que permita ver la deseada oscuridad abisal.
El nivel de detalle es algo más que favorable, existe una buena recreación de matices y la descomposición de los armónicos ayuda a representar una mayor riqueza en este sentido. Pese a todo, el micro detalle no es tan explícito y la representación de los aspectos nimios es apreciable, aunque no profundo, ni tampoco clínico. Pero, en conjunto, todo su desarrollo encaja de forma equilibrada con el perfil musical de los Titan S.
Comparaciones
Hidizs MS2
Hace ahora justamente un año analicé uno de mis IEMS favoritos en este rango de precios. Sin embargo, he visto que todavía nadie lo ha comparado contra el Titan S. El rango de precios es el mismo, incluso su perfil es similar. El embalaje también es bastante bueno, con unos accesorios cuidados, un cable lujoso, aunque fino y una gran caja de transporte, algo inadecuada por su volumen y construcción. Pienso que, tanto el embalaje como el nivel de construcción, es superior en los Dunu. Las cápsulas de los Hidizs son de un tamaño similar, pero fabricadas en un policarbonato de calidad, muy ligeras. Pero no hay comparación que se resista frente a la construcción en aleación de zinc y el diseño de los Titan S. Así que en todas las cuestiones no relativas al sonido, los Dunu son superiores. Tan solo los Hidizs vencen en ergonomía, básicamente porque son muy ligeros, que no por adaptación pura, que podría ser hasta muy similar.
En cuestiones de sonido, los MS2 son fáciles de mover, mientras que los Titan S necesitan un claro aporte de energía superior. En los Hidizs se puede observar su naturaleza híbrida, porque existe una división entre la calidez ofrecida por su DD, mientras que también se puede percibir un mayor aspecto analítico en la segunda mitad del sonido. Mientras que los Titan S posee una afinación de graves que desciende desde el subgrave, los MS2 crecen desde ese mismo punto, llegando a su cima en el medio grave. Sin duda, existe más calidez en los Hidizs y una clara mayor percepción de graves, con más energía y peso en el sonido. Su zona baja es más ancha y abarca más, ese mayor peso en el mid-bass redondea la franja y la hace más protagonista. Por otro lado, los graves de los Titan S son más limpios, poseen menos proyección, su decaimiento es más rápido, tienen menos poso y también se ejecutan de forma ágil y algo más rápida. Al tener menos energía, los parámetros de velocidad son mejores en los Dunu, pese a que los Hidizs son buenos en este departamento. Quien guste de los graves, quizás los Titan S se le queden algo cortos, mientras que los Hidizs, sin tener que sacrificar calidad o cualidades técnicas, pueden ofrecer más punch y presencia en esta franja. Para los amantes del subgrave, no se equivoquen, andan a la par, incluso considero ligeramente superior a los Dunu. En cuanto a textura, los dos son muy disfrutables y es algo que me gusta de los Titan S, cómo un grave contenido puede ser rico en este sentido. Hay más aspereza en los Hidizs, pero porque también su superficie es más grande.
La afinación de la primera mitad de la zona media es diferente. Los MS2 tienen un cuerpo superior, la incidencia de ese medio grave que desciende más tarde, enfatiza la parte inicial del rango medio, acercándolo, mostrándolo más pleno, denso, cálido y abultado. En cambio, esta misma zona en los Titan S es más limpia, también más alejada, esta transición es más suave y menos presente, se siente más ligera y más delgada. Tanto en las voces masculinas, como en la instrumentación de esta zona, se puede percibir claramente estas diferencias. Después, están los gustos de cada uno en relación a estos aspectos. No es mejor o peor, porque técnicamente y cualitativamente, ambos son muy capaces. Se trata de pura afinación.
En la segunda mitad de los medios, cuando ya entra en acción el BA de los Hidizs, la sonoridad relativa cambia. Se siente una chispa más rápida y veloz, un flash más enérgico y más luz. En este lado despierta la cara más analítica de los MS2, con su gran nivel de precisión, definición y finura en las notas. Los Dunu son más musicales, no se muestran tan rápidos, ni salpicados, tampoco tan enfatizados. Se siente la suavidad, más cohesión y una armonía superior. De nuevo y aunque aquí la afinación es similar, la ejecución es distinta. El driver BA exhibe su carácter en los Hidizs, con todo su potencial y el driver dinámico de los Dunu, hace lo propio, pero de distinta forma. Es cierto que los agudos de los MS2, también influyen sobremanera, en la percepción de los medios altos. Y esto es claro, porque pese a un comienzo parecido, los agudos son más extensos y notorios en los Hidizs. Allí hay más rienda suelta para que las notas altas se explayen, se extiendan, crezcan y lleguen más arriba, con el beneplácito de un driver que demuestra su poder. Los Dunu siguen siendo coherentes y más controlados, así que la zona se percibe más natural y sosegada. Pero demuestran un gran carácter cuando poseen una cantidad de aire similar a un buen híbrido con un BA dedicado. Muy a tener en cuenta.
A nivel de detalle, el perfil más analítico de los MS2 se siente y los matices se muestran más remarcados, con lo que su percepción es más inmediata. Cuando se requiere rapidez, la mayor resolución de los Hidizs y su velocidad, es capaz de dibujar los transitorios con más inmediatez, lo que le otorga una capacidad de definición superior. Cuando los matices se pueden presentar en escenarios más tranquilos, pese a la diferencia de exposición, el nivel de detalle se iguala.
Los Hidizs muestran una separación más evidente, con una distancia que genera más oscuridad entre notas. Los Dunu muestran más anchura de escenario, pero menos profundidad y no tanta altura. Los MS2 ofrecen una imagen más redonda e igualada en los tres ejes, no es esférica, pero en comparación se asemeja más.
Ikko OH2
La batalla en el rango por debajo de los 100$ es cruenta. Otra novedad que juega en la misma liga que los Dunu Titan S, son este modelo de Ikko. Tienen un embalaje más grande, una buena cantidad de accesorios, con especial atención a sus únicas tips y una bolsa de piel bastante plana. Tanto las tips de silicona y su forma especial, me resultan bastante poco útiles. Algo mejores son las tips de foam, pero no suelo usarlas. La bolsa de piel tampoco es muy práctica, debido a que es bastante plana, es bonita pero el cierre no es muy adecuado. Prefiero mucho más el estuche de los Dunu. En cuanto a diseño de las cápsulas, los OH2 son muy pequeños, densos y también pesan un poco, debido a su diseño híbrido que usa metal y plástico. Innegablemente, es elegante y atractivo, se puede elegir en varios colores. Encajan muy bien y se integran de manera agradable dentro del pabellón. Otra cosa es su corta y ovalada boquilla, que puede presentar algunos problemas en la elección de tips. En conjunto, prefiero el embalaje más compacto de los Titan S, incluso el cable es superior, ya que no tiene rigidez comparada con el de los Ikko. Además, prefiero la conexión 2Pin frente a la conexión rotativa MMCX.
Los OH2 son ligeramente más fáciles de mover. Tienen un perfil más cálido, con una zona baja ligera en subgrave y claramente enfatizada en el medio y alto grave. A partir de 1kHz la curva se iguala para luego ofrecer unos agudos todavía más suaves, pero también con una buena extensión en la zona de aire. No deja de ser una vuelta de tuerca más, dentro de un perfil que guarda similitudes con el Titan S, pero que posee más cuerpo desde el medio grave hasta el centro de los medios y unos agudos más matizados.
La falta de subgrave de los OH2 se hace patente en aquellas grabaciones donde existen y se exige su aparición. De nuevo, se trata de una afinación al revés, entre ambos modelos: los Dunu decrecen desde el extremo inferior, mientras que los Ikko crecen, aunque partiendo de un punto inferior. Técnicamente hablando, la recreación de los graves es muy buena en ambos IEMS, gozando de rapidez y precisión, limpieza y detalle. Los Ikko presentan una zona baja más redonda, con un impacto centrado, una textura agradable pero menos descriptiva que en los Dunu. Existe mayor limpieza en la zona baja de los Titan S y también menos calidez. Su golpeo resulta más veloz en su ejecución y con un decaimiento más rápido, mientras que en los OH2, el mayor énfasis en el mid-bass ofrece un poco más de recorrido.
En la zona media se percibe ese sonido más concreto y parco de los Opal, con menos brillo, algo que genera una sensación de mayor oscuridad y menor extensión, certificando una calidez superior. En los Titan S existe más libertad, limpieza, chispa, más vida y dinamismo. Pese a que existe algo más de cuerpo en los Ikko, con una zona más densa y expuesta en la primera mitad de los medios, la proyección está más amortiguada, generando una contención de las notas y sus armónicos. La expansión del sonido se recorta, algo que no sucede en los Titan S, aunque éste siempre queda bajo control. Dicho control es más acentuado en los agudos, en donde las notas son todavía más suaves y matizadas. De esta forma, las notas altas de los OH2 se sienten pulidas e inofensivas, se echa de menos un poco más de presencia y alegría. Por suerte, los Dunu sí ofrecen esta diferencia.
En cuestión de detalle, los OH2 muestran una sorprendente capacidad de extracción de matices en la zona media. Debido a que los agudos no destacan demasiado, el sonido se queda más desnudo y expuesto a algunos detalles, que pueden observarse con mayor facilidad. En los Dunu no se omite tanta información de la zona alta y existen más notas a reproducir, así que es posible que sea algo más complicado discernir algunos de esos detalles, porque, en realidad, existen otros más en la música que ellos reproducen.
Si la escena de los Ikko se podría considerar como íntima, en los Dunu se representa con mayor anchura y con algo más de expansión. De esta forma, se aprecia más extensión en su imagen, con una tendencia a ocupar más espacio.
El sonido concreto de los OH2 ofrece un buen nivel de separación, con una sorprendente percepción de cantidad de aire. La sensación más abierta, etérea y vaporosa que ofrecen los Dunu, aporta una apreciación superior de la distancia entre elementos, más separación y más tridimensionalidad.
Conclusión
Muchas marcas quisieran que el lanzamiento de cada uno de sus nuevos modelos, fuera un acontecimiento. Pero, pocas lo consiguen. Entre ellas, Dunu puede hacerlo, máxime, cuando tienen tantos motivos para que el nuevo modelo sea un éxito. En esta nueva hornada de productos de Dunu, existe una clara exigencia en presentar una elevada relación calidad/precio. Para ello, tanto el diseño, como el nivel de construcción, la presentación y los accesorios, son superiores a lo ofrecido por otras marcas en su mismo rango. Pero luego está el sonido, que debe estar a la altura. Y esto no es un aspecto baladí, para una marca que se preocupa por tomar el pulso de las tendencias actuales y de los aficionados, en general. Con toda esta base, el paradigma de un nuevo modelo de Dunu, es el Titan S, porque cumple todos y cada uno de estos elementos anteriormente descritos. En realidad, el resultado es una gran suma de esfuerzos que tienen su recompensa. Quien adquiere este modelo sabe que tiene entre sus manos un valor añadido, un plus de de distinción y no solo por eso va a sonar mejor. Este elemento diferenciador debe quedar sustentado por la efectividad real de un gran sonido. Es aquí donde los aficionados deben ser más críticos con cada nuevo modelo de esta marca. Y, realmente, ellos lo son. Y yo también. Pero mientras Dunu siga diseñando, fabricando modelos como este y consiguiendo este sonido… ¡me encantará ser crítico!
Fuentes Usadas Durante el Análisis
- ACMEE MF02s.
- ACMEE Magic Sound 4 AK4493EQ 768K
- xDuoo Link2 Bal.
- Hidizs S9 Pro.
- Earmen Sparrow.
- E1DA #9038D.
- HiBy R3 Pro.
- Burson Audio Playmate.
- S.M.S.L Sanskrit 10th MKII + iFi ZEN CAN.